El término Membrillo proviene del griego y quiere decir manzana de miel y es una planta arbórea que tiene la virtud de ser la única especie del género Cydonia.
La planta del membrillo pertenece a la familia Rosaceae al igual que el manzano y el peral.
El nombre científico del membrillo o membrillero es Cydonia Oblonga. Se originó en el sudoeste asiático, pero hoy en día lo podemos localizar en otros lugares como por ejemplo, en Turquía e Irán.
Comúnmente tiene otros nombres como: azomboero de Granada, bembrillo, cacho, membrillo de Portugal, zamboa de Granada, codonera, coduñer, lucuma de castilla, etc.
Cabe destacar que el membrillero de Japón (Chaenomeles speciosa), no es realmente un tipo de membrillo a pesar de nombrarse así.
La mitología griega cuenta que ésta fue la “manzana de oro” que Paris le regaló a Afrodita, como símbolo de amor y fecundidad.
De ahí provino el ritual de bodas que usaron después los griegos antiguos y que consistió en que la novia mordiera el membrillo antes de la luna de miel para garantizar un primer beso aromatizado.
Fue a partir de Grecia e Italia que la fruta se expandió a otras regiones con veranos cálidas, por ejemplo: Argentina, España, Balcanes, la cuenca del Mediterráneo, Uruguay, entre otras.
Según datos ofrecidos por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, los principales productores de membrillo en 2016 fueron Uzbekistán con 129.467 toneladas, Turquía con 126.400, China con 111.968 e Irán y Marruecos con una producción de 74.418 y 32.087 toneladas respectivamente.
Además de ser una fruta nutritiva, el membrillo funge como un aromatizante de ropas guardadas en las gavetas de los franceses; interesante ¿verdad?
Lo más indicado para hacer una buena compra de membrillos es que estén totalmente maduros, o sea, nada de estar duros ni verdes.
También, la piel tiene que estar amarilla e intacta. En ocasiones tiene algunas manchas productos del exceso de madurez, pero esto no representa un problema siempre y cuando se cocinen inmediatamente.
La conservación del fruto es otro tema de relevancia. Cuando está verde se aconseja dejarlo madurar a temperatura ambiente.
Si está maduro, se recomienda pelarlos, meterlos bajo el agua hasta que queden bien limpios, cortarlos y rociarles un poco de zumo de limón para evitar que se oxiden.
Luego se meten en el refrigerador envueltos de manera independiente. Así se conservarán durante algunas semanas.
Árbol de membrillo
El árbol de membrillo es caducifolio y no tiene gran tamaño, alcanza solo hasta 4 metros de altura. No obstante, algunos ejemplares cultivados pueden llegar excepcionalmente a los 6 m.
Su tronco es erecto, liso y de color gris; aunque con el paso del tiempo va mostrando algunas escamas. Las ramas son curvas, flexibles y se caracterizan por la firmeza cuando son nuevos.
Las hojas son simples, alternas, ovaladas y con un largo entre 6 y 11 cm. Si se observa la parte de arriba de las hojas, éstas muestran muchos pelos blancos. Todas forman una copa esférica y bien tupida.
El surgimiento de las flores ocurre en primavera, luego del nacimiento de las hojas. Éstas son individuales, hasta de 5 cm, con 5 pétalos y 20 estambres. Algunas son de color rosa y otras son blancas.
Las raíces se caracterizan por ser superficiales y considerablemente extensas.
Membrillo fruta
La fruta del Membrillo también se conoce con este mismo nombre. Su aspecto es periforme. La longitud fluctúa de 7 a 12 cm de largo y de 6 a 9 cm de ancho.
La corteza es dura y está cubierta por una pelusa similar al algodón, por lo que es susceptible a caer cuando se roza, o en la época otoñal.
El fruto sufre una metamorfosis en su coloración; mientras esté inmaduro, es verde con una pilosidad gris clara; al alcanzar la madurez asume una coloración amarillo- dorado brillante.
Cuando el fruto se abre encontramos una pulpa dura que desprende un aroma atrayente. El sabor es ácido y en su interior contiene hasta 6 semillas.
Por otra parte, tras ser cosechado se pueden conservar hasta 3 meses, teniendo en cuenta una temperatura de 00 C y una humedad relativa próxima a 90%.
Tipos de membrillo
Existen diversos tipos de membrillo, diferenciados por su sabor, consistencia, tiempo de maduración y forma.
Entre los más comunes y conocidos se encuentran:
- Membrillo común
- Membrillo Champion
- Membrillo Wranja gigante
- Membrillo Esferoidal
- Membrillo Fontenay
- membrillo Vandeman o Van de Mau
- Membrillo Esmirna
- Membrillo Angers
- Membrillo de Portugal
- Membrillo Vrauja o Breija
El Membrillo común se viste de amarillo dorado durante su madurez (en octubre). Es de un tamaño, producción y vigor, medios. Esparce un aroma penetrante y es el más dulce de las variedades.
El membrillo Champion destaca por su sabor y olor exquisitos. Es de tamaño mediano.
El Wranja gigante destaca por su gran volumen. Tiene forma redondeada y es muy aromático. Contiene una pulpa de color claro y sabor ácido. Esta variedad es la más comercializada en España.
El membrillo Esferoidal es voluminoso. Su piel tiene un tono amarillo y la pulpa es aromática.
El membrillo Fontenay tiene gran tamaño. Muestra una piel amarillo verdosa. La pulpa es aromática. Su recolección se realiza entre septiembre y octubre.
El Vandeman o Van de Mau es de gran grosor. Tanto la piel de tonalidad amarilla, como la pulpa, son muy aromáticas. Su proceso de maduración ocurre en octubre.
El Membrillo Esmirna es una variedad de hoja caduca que al igual que otras variedades madura en el mes de otoño. Es de lento crecimiento y la planta se considera auto-fructífera, lo que significa que con solo plantar una, ya se produce el fruto.
El membrillo Angers tiene forma esférica y es de tamaño grueso. La piel es amarilla y la pulpa olorosa. Se destaca por su gran producción. Madura igual que otros en el mes de octubre.
El membrillo de Portugal es de gran tamaño. Tanto su piel como su pulpa son aromáticas y de color amarillo. La madurez también ocurre en octubre. El árbol se destaca por su vigorosidad y producción.
Membrillo Vrauja o Breija proviene de un árbol muy vigoroso y fértil. Ofrece unos frutos grandes, con la piel amarilla y la carne olorosa. Esta variedad también madura en octubre.
Propiedades del membrillo
El membrillo en estado natural cuenta con 57 Kcal por cada porción de 100 g.
De la misma manera, es fuente de hidratos de carbono (15.3 g), fibra alimentaria (pectina y mucílagos, 1.9 g), grasas (0.1 g) y proteínas (0.4 g).
Atesora fundamentalmente vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B5, B6, B9); pero también cuenta con vitamina A y C.
Se enriquece además con la presencia de minerales, tales como: calcio, hierro, magnesio, sodio, zinc, potasio y fósforo.
Todos los nutrientes antes señalados lo hacen acreedor de propiedades demulcente, diurética, emoliente, expectorante, colutorio, tonificante, digestivo, cicatrizante y antidiarreica.
Contiene también taninos que le confieren su propiedad astringente y antiinflamatoria; y ácido málico que le confiere su propiedad desinfectante y desintoxicante.
Las semillas son de utilidad, teniendo en cuenta sus propiedades emolientes, antidisentéricas y astringentes.
Beneficios del membrillo
El árbol de membrillo esparce sus dotes a la alimentación, la decoración (planta ornamental), la industria cosmética y la medicina.
Este fruto se recomienda para tratar problemas del sistema digestivo como la gastritis, el síndrome del intestino irritable, las úlceras gastroduodenales y la diarrea.
Su contenido en ácido málico o ácido L-málico, le garantiza al organismo la energía o ATP que necesita para lograr un funcionamiento adecuado.
Como consecuencia, se produce una reducción de la fatiga crónica, así como ausencia de los dolores musculares. También es muy efectivo para eliminar el ácido úrico.
Otra de las bondades del membrillo fruta es combatir los resfriados, faringitis, bronquitis y la hipertensión arterial.
Gracias a su riqueza de pectinas, previene afecciones cardíacas como consecuencia de una menor absorción de colesterol y grasa.
Además, su aplicación externa es muy útil ante fisuras anales, hemorroides, escaldaduras y grietas en los senos.
Uno de los minerales estrella que alberga es el potasio, necesario para la generación y transmisión del impulso nervioso, así como para el funcionamiento muscular adecuado.
También intervienen positivamente para la salud: el calcio y el magnesio, pues fortalece los dientes y los huesos; y mejorara el funcionamiento intestinal, respectivamente.
Se suma a los beneficios de este maravilloso fruto su bajo aporte calórico, lo que lo hace un alimento opcional para mantener o disminuir el peso corporal.
Cabe destacar que cuando se consume con azúcares añadidos, por ejemplo: en el dulce o mermelada de membrillo; se anula dicha propiedad diurética.
Además, contiene mucílagos, una fibra que propicia la retención de agua. Gracias a ellos la fruta evita la deshidratación provocada por vómitos.
También es muy recomendado para fortalecer el cabello y la piel.
Las semillas también juegan un papel importante para la salud; aunque tiene algunas contraindicaciones.
Al liberar cianuro pueden provocar náuseas y malestar en el estómago; por supuesto, esto es sólo si se consume en cantidades exageradas.
No obstante, el cocimiento de semillas de membrillo es beneficioso como expectorante, alivia la tos seca y las inflamaciones bronquiales.
¿Cómo se come el membrillo?
El membrillo fruta no suele consumirse crudo, esto se debe a su sabor ácido, su dureza y carácter astringente.
De todas maneras, hay atrevidos como los mexicanos y los chilenos, que preparan el membrillo crudo junto con sal, chile y limón; o lo trituran hasta darle muerte al sabor astringente.
Cabe destacar que en México se celebra la Feria del Membrillo en agosto, y como su nombre indica, lo más importante es la comercialización de la fruta y los productos derivados de ésta.
Por lo general, el membrillo se consume en compotas, gelatinas, licores, confituras, cremas, zumo, mermeladas y/o pudín.
En este sentido, cada país tiene sus costumbres con respecto a este tema, por ejemplo: En Alemania y Polonia se prepara vino con el zumo que se extrae de la fruta.
En España hay un afamado plato conocido como carne de membrillo o dulce de membrillo.
En Argentina y Uruguay se emplea para hacer torta y postres como el queso con membrillo.
También hay quienes gustan de hornearlo o cocerlo para añadirlo a platillos más acabados como la macedonia de frutas.
Cultivo de Membrillo
El cultivo del árbol de membrillo precede al de sus parientes, el manzano y el peral; y actualmente se emplea como base para injertar éstos, aprovechando su precocidad y resistencia al frío.
Ya que, el membrillero es un árbol frutal adaptado tanto a climas suaves como fríos, por ello soporte inviernos largos y/o veranos muy calurosos. Lo importante es que gusta de la exposición a la luz.
Requiere preferentemente suelos fértiles, un poco ácidos, permeables y húmedos. El pH debe oscilar entre 5.6 y 7.2.
El membrillero se propaga fundamentalmente por cortes de la madera. Esta acción se realiza culminando otoño y abriendo las puertas el invierno; cuando los brotes alcanzan los 25 cm de altura.
También puede propagarse por semillas, sobre todo cuando se quieren obtener variedades nuevas o injertarlo encima de perales o manzanos.
Por esta última vía la producción ocurre al cabo de los 5 años aproximadamente.
La siembra se realiza directo en el suelo o en una maceta, a finales de invierno y principios de la primavera.
El agujero debe tener un diámetro 2 veces superior a la profundidad y la raíz del membrillo tiene que quedar al nivel del suelo.
Tambien se pueden propagar mediante acodo en aporcado o clonal. Si eliges esta opción debes saber que esto se lleva a cabo en el mes de julio, o sea, a finales del otoño.
Para ello debes pasar las plántulas a un vivero y entre agosto y septiembre ya estarán listas para injertar.
Un detalle importante que debes tener en cuenta cualquiera que sea el método de propagación, es el riego.
Este no puede faltar, pues el membrillero es un cultivo con tolerancia cero a las sequías; no obstante, ¡no te excedas! también hay que evitar el encharcamiento.
Por lo general, acepta bien una fertilización a base de compost, lombricomposta o estiércol de animal; así como de nitrógeno durante la fase vegetativa.
Otro de los cuidados del cultivo es la poda, que se realiza en la época invernal. Consiste en eliminar las ramas secas o con tendencia a doblarse hacia el interior del árbol.
Por otra parte, las plagas que frecuentan a este árbol frutal son: orugas, polillas, taladradores y curculios. Para su control se recomienda aplicar pesticidas.
También puede ser atacada por enfermedades como: Mancha de la hoja, Mancha en ojo y Podredumbre del fruto.
La recolección se lleva a cabo a finales de septiembre hasta diciembre de manera manual. Es necesario que se haga en ausencia de rocío y se evite golpear el membrillo.
Un indicador de madurez que es fundamental es el olor penetrante del fruto y el desprendimiento de manera natural de los pelos que forman el tomento del fruto.
